COLOPHON

Cuando un círculo se cierra, la tortura
declina su presión. Se descomprime
la ergástula en el cuello, y ya no oprime.
La cuerda recupera su cordura.

El llanto desacopla su tragedia.
Los ruidos del silencio ya no matan. 
Los nudos opresores se desatan.
Los dramas se convierten en comedias. 

Cuando un círculo se cierra, la Virtud
que siempre trae consigo la Verdad,
te reconcilia con tu soledad,
te enfrenta con tu propia finitud.

Te deja respirar, te abre los ojos, 
te arenga a ver el claro sobre oscuro, 
te anima a cruzar puentes inseguros, 
te inyecta Vida sobre los despojos

y te hace (sin pregones, sin alardes, 
sin otro ministerio ni deidad
que el fuego de la propia Voluntad), 
renunciar a la Lid de los Cobardes,

en la que < por atributo y por legado >
¡ jamás ! deberías haber estado.

J A M Á S, mi amor, 
J A M Á S