Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2012

LA SANTA PACIENCIA

¨Entre tu cuerpo y el mío Nunca la extensión verás; Nadie medirá jamás La inmensidad del vacío.¨ OMAR KHAYYÁM I La trama de la Vida compone su atributo de Momentos. La Seda nunca olvida el Hilo que la urdió. Los Instrumentos perviven en la Música encendida. II La Gota abandonada que ha sido despojada de su entero, y espera desolada, trepada en el glacial despeñadero ¿sabrá que alguna vez fue marejada? Y el Mar, la azul espada clavada en el talud sin miramientos, Señor de la alborada, Amante voluptuoso de los vientos ¿sabrá que hay una Gota desgajada? III La esencia separada no pierde su virtud, no transfigura; la Gota es marejada y el Mar es el conjunto y la figura de innúmeras partículas ¡o es nada! La rueca prefijada que gira y determina va a lograr, en hábil estocada, que vuelva la pequeña Gota al Mar y el Mar a su porción desamparada. IV En franca analogía, uniendo tu universo con

CANCIÓN PARA PEDRO

I El Ángel Azul bajó hace un año, de una estrella, para alegrarnos a todos la vida y la primavera. Airado, llegó el mocoso, para opacarles belleza al encumbrado rosal y a la sutil madreselva. De a poco, se fue cortando (con invisibles tijeras) las dos alas que tenía nacaradas como perlas. De azul, conservó los ojos, para que el Cielo supiera que tiene un competidor de cuidado, acá en la Tierra. En el perchero dejó colgadas las alas nuevas, y la aureola la perdió haciendo mil volteretas… II Pedro se llama. Podría llevar un nombre cualquiera, pero eligieron dotarlo con la virtud de la piedra, que es base y cimiento fuerte, que no teme a las tormentas, que soporta el golpe artero del viento y no se amedrenta. Que seguirá de sus padres la bien dibujada huella, y hará aún mejores caminos confiando en sus propias piernas. Que dará luz en la sombra cuando la sombra nos quiera cubrir con e

MILONGA DEL PARAÍSO

I Dormite tranquilo… Adán... Soñá con los angelitos que gráciles y tiernitos cuidándote el sueño están. Dormí, que vienen y van con un vuelo delicado, librándote de pecado, imprudencias, tentaciones, y escandalosas pasiones, (que al día de hoy...) te han salvado. II Dormí tranquilo, bombón. Acomodate en la sombra del ¨árbol que nadie nombra¨ bajo un bendito edredón. Y si te agarra un bajón de azúcar, dale sin asco a las plantas de damasco, a las limas, a las peras y a las ciento veinte higueras, hasta zafar del atasco. III Relajate y mordisqueá el Jardín divino entero, esquivale al limonero, porque por agrio… ¨no da¨; pero sin miedo atacá las moras almibaradas, las uvas azucaradas, (y con la venia de Dios) si el hambre te ataca a vos, arrasá con las granadas. IV En fin, jugá dulcemente con las criaturas del bosque, que ninguna se te enrosque (silenciosa y lentamente…)

SE ESTÁ BUSCANDO UNA NENA

Se está buscando una nena rubiecita,  de ojos raros (ni tan verdes ni tan claros…) con ondulada melena. Iba a pasito de avión, al viento mismo le huía con cierta melancolía creciendo en su corazón. Disfrazada de princesa, con un par de alas cosidas, una sonrisa encendida, y un delirio de grandeza. Llevaba un libro en la mano con las rimas becquerianas, un sueño de porcelana, un futuro amor, el plano de un imposible tesoro, una mochila chiquita cargada de margaritas, y dos manzanas de oro. Si alguien llegara a saber de ella, ruego me avisen, porque según muchos dicen, ya nadie la ha vuelto a ver... La he buscado en la mirada de las nenas que parí, y aunque traté, no la vi; ¿Será que busco a un fantasma…? ¿Detrás de qué duende huyó la nena que me habitó? ¿A qué cielo habrá emigrado llevándose mis veranos? ¿Por qué enterramos los sueños que engendramos de pequeños?

INTIMACIÓN FLOREADA

Estimada esteeee...¿? a ver... bue, Poeta: ____________________ Sirva la presente para solicitarle tenga a bien arbitrar medios más fehacientes para satisfacer sus múltiples dudas afectivas y/o pasionales y/o existenciales, (por ejemplo: pregúntele al tipo y déjese de jorobarnos, m´hijita...), en virtud de que en los últimos cuatro (4) años se ha constatado una baja alarmante en el número y calidad de los ejemplares de nuestra especie. Una exhaustiva investigación de la no tan confiable O.N.G : ¨AF.A.LA.M¨(Aflojale A Las Margaritas), arrojó el lamentable dato que antecede, en cuyo informe, se la involucra a Ud. en forma directa, como principal responsable de tan penosa devastación. Al aguardo de que tome razón de lo aquí expresado - y las medidas correctoras del caso-, so pena de accionar en su contra, saludámosle (no muy) ATTE. Dra. Margarita KOMPLICADA LACOSSA ¨MARGARITAS EN EXTINCIÓN¨ (Asoc. sin fines de lucro) Departamento Legales. Dirección de contacto: www.sacameladudaquemeg

MALA PRAXIS

Se fue rompiendo el castillo, sin pausa. Los naipes uno a uno se tumbaron, y sobre un mármol frío redactaron un epitafio sin nombres ni causa. La Maestra de Obras contempló la escena sin estupor, sin dolor y sin llanto. ¡Edificarlo había costado tanto…! y sin embargo, no sentía pena. Tal vez al filo del entendimiento, el eco atroz de la cruda razón ganó la apuesta al pobre corazón que construyó sin colocar cimientos.  Ir tras tus pasos, alcanzar tu mano, fue igual de mágico, sublime, y vano…

PARA MÍ, QUE LA PIFIASTE...

Convengamos, sin rencores, que adentro este gallinero, yo exageré en cacarear, y a vos te faltaron huevos... Olga Yinnita Filósofa y veterinaria (Sicilia-Italia 1791-1861) La pifiaste en callar que jamás la quisiste. El espejo está roto. Se ha velado la luz que inundaba su foto y parece- no miento- que en esa sonrisa hay un gran nubarrón de tormenta y ceniza. Este oscuro vacío hoy le duele quizás más que el odio o el frío de un puñal sostenido en tu palma distante, espoleando el volcán de su pecho anhelante. Se ha jugado su suerte. La esperanza de vida es peor que la muerte si el amor no respira asfixiado de humo, y la sangre se frena en un mórbido grumo. Yo, que vos, le diría, que no la querés.. Es un acto valiente que la puede ayudar a enterrar lo que siente. Un manchón de palabras, dos frases concretas, un mensaje sin vuelta en pizarras secretas. Hay mujeres que chocan en un muro sin ver que ellas misma

AMOR DE IDA

Este camino ya nadie lo recorre, salvo el crepúsculo. Matsuo Basho Amor de ida: Brote inabarcable, brazo de agua, vena transparente que mil y una noches indecente con su virtud silente inconfesable, calmó mi sed antigua. Tu vertiente se deshilvana ambigua e inestable, como se apaga el sol en el poniente sobre las viejas piedras de estos ojos, llevando en sí la mar de mis arrojos. Amor de ida: Báculo divino, ramal inquieto, fuente poderosa, indescifrable espejo del destino, la irrazonable fe, la eterna rosa, la flor salvaje ardiendo entre el espino, la movediza nube presurosa, señal precisa en medio del camino, trasunto azul de ríos opulentos, punto de luz en cielos turbulentos. Amor de ida: Manzano prohibido, puntal de vida, pan multiplicado, madero al lado del bajel hundido, original motivo de pecado; con este verso gris y bien parido te digo hoy, a verbo despojado, (sin más temor que aquél que me ha dolido

¿ CUÁNTAS VECES ES POSIBLE... ?

¿Cuántas veces es posible llamar la atención de alguien? ¿Con cuántos nombres risibles y bajo cuántos disfraces? ¿Usando cuántos idiomas? ¿Trepándose a qué volcanes? ¿Destrozando cuántas reglas? ¿Desafiando cuántos cánones? ¿Con qué ensalada de estrofas académicas? ¿Con cuáles histrionismos, que en teoría, aunque sean frívolos, valen? Si lo sabrán los sonetos , si lo sabrán los romances … ¡Tantas veces publicados para los mismos debates! ¿Con cuántas fotos trucadas? ¿Con cuántas identidades consigue un alma decir lo que era mejor callarse? ¿Cuántos ríos de (¨ te quiero ¨) en una pantalla caben? ¿Cuántos entran en un libro? ¿Y en dos? ¿Y en tres…? ¿Alguien sabe? ¿Cuántos celos? ¿Cuántas súplicas? ¿Cuántas quejas redundantes? ¿Cuánta ironía afilada? ¿Cuántos penosos derrapes? ¿Qué caudal de (¨ No te vayas¨ )? ¿Cuántos (¨ Si estás, avisame ¨)? ¿Qué volumen de (¨ Te extraño ¨)? ¿Qué conjunción d

LA FUENTE DE LOS DESEOS

I La FUENTE DE LOS DESEOS ha cesado en sus funciones por un grave incumplimiento de cargos y obligaciones. La demandamos por fraude y robo de corazones aquellos pobres incautos que confiamos en sus dones. II Nadie quiso defenderla de tantas inculpaciones (ni el abogado más hábil arregla estas situaciones). En mi larga acusación, referí las ocasiones innúmeras que entregué en ella mis ilusiones. En Marzo, 8 - 10:30, movida por la aflicción, como último recurso, le arrojé mi corazón. Moneda de tal cuantía no contempla valuación y aunque no fuera ¨El Zahir¨, sí - era: ¡Mi posesión! III Una estafa de tal grado no se merece perdón, y toditas las monedas sufrieron confiscación. La dejaron clausurada, sin agua ni compasión, con el castigo perpetuo que amerita la cuestión. Tanta pruebas recabadas validaron la razón por la que fue condenada a cesar en su función. IV Cuando fui a recuperar, infeliz, mi corazón, me informaron sin temblar su compl

SUEÑOS DE PAPEL

Si el sueño fragua con final perfecto, y se cumpliera mi objetivo único, podré decir con íntima alegría que en tu anaquel vas a guardar un día cifrada en tapas y papel mi historia, mi amor y mi memoria.

SELLO DE AUTOR@

  I Cuando el año se desgaja de sus días, en tu nieve o en mi estío, ya sabemos que como agua entre las manos, lo perdemos, y que no regresará. Las alegrías y el dolor acumulados son los remos que agitamos en un mar de aguas bravías, y colgamos con antiguas letanías en un árbol de neón que encenderemos. Nos sentamos a esperar sin rebeldía, apostamos a su bienaventuranza, y entregamos los destinos a la mansa maravilla que traerán los nuevos días. O a su trágico caudal de alferecías, o a su mágico torzal de albur, que transa, la de arena y la de cal con la esperanza de saber que estamos vivos todavía. II ¿Me darías de tu espalda, un sector, el que más quema...? Mi estrategia es dibujarte una utopía en un tris (mi agilidad te asombraría) y trazarte con el roce de mis yemas,  y tu venia - las tres letras de mi nombre-. (¡Es lo menos! que podría darme un hombre.

POEMA PARA EL ALBA

¨ En el abismo de la hora más oscura, saldrá de su hogar al borde del Océano la diosa Eos, para anunciarnos la llegada de su hermano Helios.¨ Aristófanes de Bizancio (257-180) I En mi fuente no hay más agua, las monedas silenciosas (como a fragua los metales) he arrojado y se han secado los cristales del precioso manantial... Ya nada queda. II He notado que las huellas de mis yemas se borraron como estrellas temporales, se cayeron de un teclado sin vocales y arrasaron nuestras naves postrimeras. III Margaritas sin sus pétalos consuelan entre sí la desnudez del cáliz, saben que perdí en ellas la fe, ya no les cabe responder ciertas verdades que laceran. IV Una lámpara herrumbrada que se niega en la Noche Mil y Dos, a echar al aire una atisbo de locura, en su desaire, al vacío de tu magia me condena. V La energía de este amor era inven

EL PEOR DE LOS PECADOS

Image Photo 505 editada. I Mirá la imagen (solo unos segundos), después decime, amor, si te motiva a ver en ella el quid de nuestras vidas sobre la lid efímera del mundo. ¿Sabés...? la miro y más la veo, siento que la existencia toda en sí, refleja. Porque ese tren veloz pasa y espeja que no tenemos más que este momento. Ella está ahí, como una espectadora, dentro de un plasma estático atrapada, viendo pasar tu estela, resignada a no poder seguirte… (por ahora). II En la Estación del Tiempo no hay piedad. El que no sube al tren, se queda anclado en ¨El peor de todos los pecados¨, que es no atreverse a amar en libertad. Mirá la imagen solo unos instantes. Si estás arriba de ese tren, ¡bajá! Rompé el cristal y rescatala ¡ya! o cuando puedas... Pero que sea antes de que les roben todos los diamantes, de que el reloj les hunda su puñal, de que el destino grabe su final sobre una tapa de mármol gigante. Tendría que ser antes...

ODA AL INSTANTE

I Mil vidas –perdón- Mil y una , le cambio a Dios o al Destino, por ese factor divino que tiene igualdad ninguna (y en el mismo Edén me acuna) de cada infinito instante que con vos- azar mediante- tendré hasta alcanzar la Muerte, porque no quiero otra suerte ni otro camino delante.   II Y a riesgo de no vivir en suma, más que unas horas, ¿de qué me sirven auroras y ocasos por advenir? si solo puedo existir con tu efímero contacto, muriéndome ¨ipso facto ¨ cuando te vas lentamente alejando entre la gente, sin haber firmado un pacto… III   Pero si somos un tris, una chispa, un santiamén, un soplo de luz, un tren que pasa en loco desliz; me inclino por ser feliz de verdad- por un segundo- y no transitando el mundo desdichada el tiempo todo, porque no encuentro otro modo más hermoso y más fecundo.   IV Y entonces, cuando me lleve, sin ¨ peros ¨, la Dama

HAIKU / lebrón

Rotos los huevos, se pudrieron las yemas. ¿Te quedó clara? 

ODA AL SILENCIO

I ELLA aportó las palabras; ÉL, los silencios sin tregua. Y entre los dos engendraron una jarcia de poemas. ELLA les puso el amor; ÉL, la pura indiferencia, y así se fueron gestando con la quietud de una perla. II ELLA dejó de escribirle un día de primavera, un poco por decepción y otro poco por tristeza. ÉL siguió hablando con otros usando sus propias letras, pero nunca utilizó ese recurso con ELLA. III El tiempo pasó volando (casi al ras de las estrellas), y entre el silencio y los versos se durmieron los poemas. Las palabras se preguntan que habrá ocurrido con ELLA, y aunque articulan mil frases no atinan a una respuesta. Quizás el silencio de ÉL también logró convencerla, y le ganó la batalla a su cascada de letras. O simplemente eligió con un gesto de prudencia, acallar el trino en vano de tanta trova indiscreta. Cuando en las ramas de un árbol las aves lugar no encuentran,  renuncian a hacer el nido, camb

EL PRECIO DE LA CORDURA

I Hasta El Quijote un buen día o un mal día... - no lo sé- aceptó perder la fe y resignar su utopía. Será porque no hay porfía que subsista eternamente, por más de que quien detente defecto tan obstinado, se jacte de ser porfiado adelante de la gente. II No sabemos -nadie sabe...- si Don Alonso Quijano era en verdad tan insano, o apenas- si acaso cabe- un cuerdo que vio en la llave de la locura el camino para cambiar su destino por un mejor existir, y para siempre vivir en un recuerdo divino. III Si hasta el Quijote entendió que solo fue una locura su imaginada aventura y juicioso, retractó. Me pregunto: ¿Por qué yo no he de pensar que en un rayo debo bajar del caballo al que subí delirando, y en el que sigo avanzando con un derrotado sayo?. IV Estoy perdida en el ancho erial cubierto de espinas rumiándome las inquinas sin gloria, ni amor, ni Sancho. Y está tan lejos mi rancho, q

ODA AL INSTANTE

I Mil vidas –perdón- Mil y una, le cambio a Dios o al Destino por ese factor divino que tiene igualdad ninguna (y en el mismo Edén me acuna) de cada infinito instante que con vos- azar mediante- tendré hasta alcanzar la Muerte, porque no quiero otra suerte ni otro camino delante. II Y a riesgo de no vivir en suma, más que unas horas, ¿de qué me sirven auroras y ocasos por advenir? si solo puedo vivir en tu efímero contacto, muriéndome ¨ipso facto¨ cuando te vas lentamente alejando entre la gente sin haber firmado un pacto… III Si apenas somos un tris, una chispa, un santiamén, un soplo de luz, un tren que pasa en loco desliz; hoy voto por ser feliz de verdad- por un segundo- y no transitando el mundo desdichada el tiempo todo, porque no encuentro otro modo más hermoso y más fecundo. IV Y entonces, cuando me lleve, sin ¨ peros¨ , la Dama Fría el ya prefijado día con gesto inmutab

SONETO CENICIENTO

Perdí el zapato y me volví a buscarlo, pero el vestido de seda ampulosa sobre la escala toda resbalosa me jugó en contra y me obligó a pisarlo. Lo convertí en mil quinientos cristales que se clavaron en mi pie derecho, mientras llorando, pensaba: ¨¡Bien hecho! que merecidos tengo estos puñales!¨ No es bueno andar corriendo en escaleras buscando príncipes que no vendrán, y hadas que nunca nos convertirán la vida real en absurdas quimeras. Así que, vamos, ¡ levántese m´hija, y tanta suma de yerros... corrija ! 

Y ¨A LA FINAL¨ ¡ME PLANTÓ!

I ¿Y a ¨la final¨? ¡ me plantó ! igual que si fuera un pino: con un regalo en la diestra y en la siniestra un suspiro… Parada como un semáforo, colgando el alma de un hilo, la blusa floreada nueva y mis zapatos más lindos. La lencería estrenada para ese solo motivo, y bien aromatizada con un perfume ¡carísimo! II Si al menos, que no venía, el muy ruin, me hubiera dicho, me habría ahorrado tres cuentas, el mal trago y el fastidio. Ya tengo unos veinte brotes, cinco ramas y dos nidos que me da pena tirar, por los pobres horneritos. Eché raíz ¡tan profunda! que a un costado, rompí el piso, y si fuera Navidad, tendría luces y adornitos. III No sé cómo voy a hacer (sinceramente, les digo) para volverme a mi casa si es que no viene este tipo. En fin… me dejó plantada, ¡igual que si fuera un pino! con un regalo en la diestra y e