AFINANDO EL VIOLÍN

I

Amor es como un chiquito…
no admite medio reproche, 
no tiene miedo a la noche, 
ni a la tormenta ni al grito.

Adolece de prurito,
jamás teme importunar, 
y si te ve descuidar
un segundo la estacada, 
se manda alguna trastada
imposible de arreglar.

II

Amor se disfraza a veces
con volcanes en los brazos
y te mete en embarazos, 
que sin pasar nueve meses, 

te multiplican reveses
y ameritan un infarto, 
o te adelantan el parto
con contracciones y todo,
encontrando siempre el modo
de ventajear el reparto.

III

Amor te deja varada, 
sin agua ni rumbo cierto
y en el medio del desierto: 
 sin la ropa, despeinada, 

con la flecha atravesada; 
con crisis de identidad
y sin personalidad,
escribiendo estupideces
y evidenciando (con creces) 
que estás frita de verdad. 

IV

¡ A Amor le perdonan todo !!! 
que te mire y te fulmine, 
que de rodillas te incline, 
que le des la mano, el codo; 

que no le encuentres el modo
de frenar sus sacudones
y que salgan corazones
por tus ojos, tus orejas, 
en las más preciosas rejas 
de sus besos querendones.

V

Amor, de principio y fin, 
es veneno en el engaste.
- Y si ya te enamoraste ? 
- Aunque no seas violín…

SONASTE

S O N A M O S