Me declaro en estado de impaciencia,
rebeldía, premura, cosquilleo,
incerteza, litigio, devaneo,
y por ende, total inconsistencia.
Me declaro improbable, discutible,
sin lectura sencilla, despeñada,
y en volcánica nube involucrada
a partir de erupción incontenible.
No deparo la mínima certeza
y anticipo el mayor de los dilemas,
no respondo por ni uno de los temas,
no me atrevo a firmar una promesa.
Y es posible que busque cualquier modo
de borrar lo que he escrito con el codo.