MARCO TEÓRICO
Retomamos a Émile Benveniste (1902. Alepo, Siria, entonces parte del imperio
otomano. Lingüístico y semiólogo francés). Muere en París en 1976.
Sostiene que “el enunciado se constituye en el acto mismo de enunciar; es
la apropiación del lenguaje por un sujeto”.
Es decir, el lenguaje no es sólo un sistema, sino que cobra vida cuando
alguien lo pone en acto: y es el “yo” que se constituye en ese momento.
Para profundizar este tema, vamos a trabajar con la epopeya de Gilgamesh,
quien se expresa en 1era persona en ciertos pasajes, narra sus propias
hazañas y reflexiona sobre su destino.
Según la teoría de Benveniste, esta apropiación de la palabra lo constituye
como sujeto heroico y como voz que trasciende el tiempo: él existe en la
historia a través de su enunciación.
Yo se enfrenta a un tú, y a través del enunciado, el sujeto existe en el
discurso.
Ejemplo: cuando Gilgamesh clama por la muerte de Enkidu o
cuando habla de su miedo a la muerte, el acto de decir revela quién es, lo
construye como sujeto doliente y no sólo como guerrero.
A partir de la historia que relata el poema épico, vemos que
Gilgamesh, rey de Uruk, es un gobernante fuerte pero tiránico; los dioses
crean a Enkidu para equilibrarlo.
Tras enfrentarse, Gilgamesh y Enkidu se hacen grandes amigos y juntos,
vencen a monstruos y atraviesan desafíos.
Los dioses castigan esa osadía y condenan a Enkidu a morir, lo que sume a
Gilgamesh en un profundo dolor.
Temeroso de su propia muerte, emprende un viaje en busca de la
inmortalidad.
Llega hasta Utnapishtim (el Noé mesopotámico), único hombre inmortal, y
éste le revela que la vida eterna es un privilegio reservado a los dioses.
Gilgamesh consigue por un momento una planta rejuvenecedora, pero una
serpiente se la arrebata. Entiende entonces que su destino es la muerte,
como el de todo humano.
Finalmente, comprende que la verdadera trascendencia está en sus obras y
en la memoria de su pueblo. Por lo que alcanza una inmortalidad simbólica.
Uruk: una de las primeras ciudades de la humanidad (Mesopotamia), al sur
de la actual Irak, cerca del río Éufrates. Sus ruinas están en la región de Warka.
Transmitida oralmente durante siglos, la epopeya de Gilgamesh no tiene un
único autor y tiene atribución anónima, datada alrededor de 2700 AC.,
inspirada en un rey real que existió en Uruk.
El poema escrito más antiguo data de unos 4000 años atrás.
Es considerada la obra literaria más antigua de la humanidad que
conocemos.
Hacia el siglo XVIII AC, escribas babilonios y sumerios la pusieron por escrito
en tablillas de arcilla, en escritura cuneiforme.
La versión más completa conservada es la de Asurbanipal (siglo VII A.C.),
encontrada en su biblioteca de Nínive.
Propuesta DE TRABAJO
DESDE SAUSSURE: el poema es parte de la lengua sumeria/acadia; refleja las
convenciones del sistema lingüístico y cultural de la época.
DESDE BENVENISTE: cuando Gilgamesh dice YO, allí se constituye como sujeto,
porque el enunciado lo hace existir en palabra.
A partir de estos conceptos, colocar con qué autor se identifican las siguientes
afirmaciones:
GILGAMESH APARECE COMO UN PERSONAJE PRODUCTO DE LA TRADICIÓN
LITERARIA Y DE LA CULTURA MESOPOTÁMICA
ES UN HÉROE QUE ENCARNA VALORES COLECTIVOS
SU RELATO CIRCULA DENTRO DE LA LENGUA DE LA ÉPOCA
CUANDO GILGAMESH HABLA EN PRIMERA PERSONA, LLORA POR ENKIDU O
TEME SU PROPIA MUERTE SE CONSTITUYE Y TRASCIENDE
NO ES SOLAMENTE UN SÍMBOLO CULTURAL SINO UNA VOZ SINGULAR
EXISTE PORQUE SE APROPIA DE LA PALABRA
LA EPOPEYA NO SURGE DE UN INDIVIDUO AISLADO SINO DE UNA LENGUA
COMPARTIDA QUE FUNCIONA COMO UN CÓDIGO SOCIAL
EL HÉROE SE COMPRENDE COMO UN SIGNO DENTRO DE ESA RED
LA LENGUA DEL POEMA GARANTIZA QUE EL MITO COLECTIVO SE
CONSERVE
CUANDO GILGAMESH HABLA EN PRIMERA PERSONA APARECE EL SUJETO
EN ACTO
EL HÉROE AL DECIR YO, SE VUELVE UNA VOZ ÚNICA CONSTITUYENTE DE SU
PROPIO DISCURSO.